Centenario- Eduardo Chillida: Raíces Universales y Transformación Artística

Hoy,10 de enero de 2024 se cumplirán cien años del nacimiento de Eduardo Chillida. Como se dice en la web del museo, Eduardo Chillida es “uno de los artistas españoles más universales e influyentes del siglo XX. Con sus raíces en el País Vasco, sus manos abrazaron los horizontes de todo el mundo y los transformaron en lugares únicos para el encuentro de la sociedad”.

Decía: «Soy como un árbol, con las raíces en un país y las ramas abiertas al mundo.»

Chillida Leku: Un Retorno al Pasado y un Encuentro con lo Diferente

Si se estudia su obra enseguida se vislumbra que estaba abierto a otras culturas, pero siempre conservando sus raíces.

Esto ya respira en Chillida Leku, un lugar que por un lado te lleva al pasado, cuando ves los colores de los árboles con sus diferentes tonos de verdes, las esculturas que se elevan como dólmenes, y el caserío. Pero es un espacio al mismo tiempo, abierto al encuentro con los diferentes; aunque a la hora de la verdad no lo seamos tanto.

La Espiritualidad de Chillida Reflejada en Chillida Leku

Como he podido leer, Chillida era una persona muy espiritual y muchas de sus esculturas guardan relación con la mística. Esta cuestión se refleja en su obra.

¡Y tanto que se refleja!

Basta con darse un paseo por Chillida Leku. Tenemos la suerte de haber impartido allí clases de yoga todos los sábados de julio y agosto desde que comenzaron con esta iniciativa. Y esperamos estar otro verano más.

Yoga en Chillida Leku: Un Encuentro entre la Naturaleza y el Arte

En los jardines de Chillida Leku hay hayas, robles y magnolios que conviven en armonía con las grandes esculturas de acero y granito, las cuales forman parte del paisaje.

Yoga y naturaleza en Chillida Leku

En relación con Chillida Leku; Eduardo Chillida decía: «Encontré un espacio donde mis esculturas pudieran descansar y la gente pudiera caminar entre ellas como por un bosque.»

Tanta es la influencia en la búsqueda de espacios armoniosos, que el jardín donde impartimos las clases en verano fue denominado el Jardín Zen por el propio Eduardo Chillida y su mujer. Las clases de yoga se desarrollan allí cuando hace buen tiempo, un lugar que parece estar apartado, como escondido, haciéndolo más especial y mágico.

Yoga y meditación en Chillida Leku

Si llueve, las sesiones de yoga se imparten dentro del caserío, siendo también un sitio muy especial. Cuando fuera arrecia la lluvia, la calma en el interior del caserío, con su mezcla de olores, moviéndonos a través de las posturas de yoga y la respiración entre las esculturas, es algo también mágico.

Clases de Yoga en Chillida Leku

En el jardín Zen, nos contó su nieto Mikel Chillida, que sus abuelos Eduardo Chillida y Pilar Belzunce, solían contemplar la puesta de sol. Allí compartían sus pensamientos y repasaban como les había ido el día.

Continúa explicándonos que “ellos mismos le pusieron el nombre de “jardín Zen” y nos gusta mantenerlo así, resguardado como un espacio de reflexión y meditación”.

Un Vistazo al Jardín Zen de Chillida Leku: Entre Esculturas y Reflexiones

La escultura colocada en el centro del jardín (“Gora bera III”) nos recuerda el equilibrio entre la materia y el espacio, Chillida ha realizado la balanza perfecta.

Posturas Yoga Chillida Leku

Aunque no se parece a los jardines japoneses de los que proviene este nombre, si es un espacio tranquilidad, recogimiento y meditación, un hogar para volver a conectar con la naturaleza, donde pasear y contemplar los árboles, Sin lugar a duda, el jardín ZEN invita a conectarse con la naturaleza y practicar clases de yoga.

Naturaleza, Yoga y Chillida Leku: Un Tríptico Armónico

Hay quien dice que los jardines y los bosques nos relajan porque compartimos forma con los árboles. Y es que, con todas sus terminaciones, el sistema nervioso es arbóreo en su estructura. De hecho, existe un pueblo en Oceanía que utiliza la misma palabra para designar la piel humana y la corteza de los árboles.

De hecho, desde tiempos inmemoriales el bosque fue el lugar favorito de los yoguis y yoguinis para sus prácticas. Los árboles fueron su hogar porque sus ramas y hojas les ofrecían protección, sus frutos y nueces fueron su alimento. El bosque simboliza también un mundo puro, donde se puede llevar una vida contemplativa sin propiedades terrenales.

Por último, una curiosidad, entre los árboles que puedes ver en el museo, hay un Cedro del Himalaya. Es uno de los árboles más longevos, podría llegar a durar cerca de un milenio y está asociado a la religión hindú, especialmente a la figura de Shiva. Es importante decir que su nombre en botánica es Cedrus Deodara que significa, derivado del sánscrito, madera de los dioses.

Arboles Naturaleza y Yoga en Chilllida Leku

¡Esperamos que encuentres este cedro en tu próxima visita y disfrutes de una clase de yoga este próximo verano en este espacio mágico!
Si estás pensando en adentrarte en el mundo del Yoga, consulta nuestras clases de yoga en el centro.